viernes, 27 de noviembre de 2015
Renato Cisneros - La distancia que nos separa
La distancia que nos separa
Renato Cisneros
Editorial Planeta
355 pp.
"Este libro es una novela de autoficcion...". Esta simple advertencia te persigue a lo largo de La distancia que nos separa de Renato Cisneros, periodista, mediático escritor quien puso de cabeza la FIL2015 y cuyo libro se colocó como el más vendido de la feria. Tuve que hacer una enorme cola con mi hija colgada de un arnés (lo que me facilitó pasar la cola, debo confesar) y no hubo manera de ingresar al salón donde presentaría su novela con un aforo de 100 personas y 600 esperando caber en donde era imposible.
Estar en la lista de los libros más vendido de la FIL2015 no es necesariamente un orgullo: es un éxito comercial (es decir, los libros que lo acompañan son de una disparidad que se los dejo a su discreción) y tomando en cuenta que su autor es popular (sobre todo luego de haber alcanzado un relativo éxito como bloggero de Busco Novia), lo que esperaba era que el libro tenga una calidad literaria notable.
Y de eso se puede estar seguro. Cisneros se ha asegurado de regalarnos poesía, pero es su prosa y en concreto la que llena las páginas de este libro la que consigue que su autor se coloque entre los mejores de su generación. Creo adivinar que de la enorme cola de gente aprestada a recibir la firma de su autor (y si, me quede sis firma...) no todos habrían quedado felices con el libro. A diferencia de otros textos de Cisneros, este es íntimo, muy emocional, complejo y aunque su prosa es ligera y firme, su lectura no es igual de ligera (editorialmente, es arriesgado mantener un capítulo de 100 páginas).
¿Es esto una biografía? ¿Es un ejercicio de psicoanálisis? ¿Es una declaración de madurez? ¿O es sencillamente la búsqueda de una identidad? Es todo esto y quizá eso a lo que su autor de refiere como una "autoficción" porque no es la vida misma, es la vida recreada. Cisneros no se calla nada: confiesa sus delitos, su descarnada crueldad con las lagartijas,de la pérdida de la fe, inclusive sus dudas entre la sinceridad entre familiares y amistades que lo debe de haber metido en algunos problemas, pero no es un libro biográfico ni de chismes. Es el libro de un hijo y su padre.
Diferentes lectores encontraran diferentes formas de abordar el libro y yo solo puedo hablar de la mía: soy contemporáneo con Cisneros, y eso hace que la figura del Gaucho Císneros, su padre, sea realmente de autoficción: no he contrastado su imagen literaria con su imagen pública. Me he tragado al personaje que su autor quiere construir, un hombre duro, recio, distante, inabordable, severo, incapaz de complacer, pero también un hombre de familia, preocupado por la educación de sus hijos, de que nada les faltase, honesto, sincero y sobre todo valiente, inflexible, seguro de si mismo. Es resumen: un padre como muchos de los que hoy rozamos los cuarenta hemos tenido: un hombre que puede ser tan distante que, en el caso del Gaucho Cisneros, con una dentadura postiza desde sus años de cadete, sonreía desde el vaso de cristal donde dormía su sonrisa.
Este libro es doloroso por momentos, es un libro que su autor necesitaba escribir para iluminar su espacio, cubierto de la sombra de un personaje enorme y encontrar respuestas en las contradicciones que los envuelve a ambos; Renato se da cuenta en su niñez que su padre es un hombre importante y treinta años más tarde se encuentra en un sala atestada de gente presentando un libro sobre él, repitiendo su éxito como declamador con un texto escrito por su padre. Cisneros le encuentra sentido y relación a eventos que para otros pueden pasar inadvertidos: tal vez sea el deber de un hijo separarse de su padre lo suficiente para verse reflejado en él de cuerpo entero.
Hoy tengo una hija (algo que quizá le suceda a Renato en algún momento): algunos hijos nos convertimos en padres y La distancia que nos separa no solo nos pone frente a nuestro hacedor, sino ante nuestro nuevo papel de hacedores. "Si la muerte de un hijo entumece al padre, la muerte del padre despierta al hijo".
El libro culmina con reflexiones sueltas, como inconexas, escritas con pasión y nostalgia. Me hizo recordar a las páginas finales de Mortalidad de Christopher Hitchens, en donde su autor suelta sus últimas ideas, apresurado antes que la muerte lo alcance. Renato parece querer despojarse de la sombra de su padre, exorcizándolo, reinventándolo, pero sobre todo reinventándose a si mismo. Ha logrado un libro íntimo y personal, sin tener que ser un libro escandaloso. Afortunadamente Cisneros ha tomando un relato personal y ha utilizado su momento, su popularidad como periodista (con rana incluida), para acercarnos a un éxito literario. Ha arriesgado construyendo un texto en donde el peso esta en la literatura y no en su imagen, acercándose a otros autores de su generación y alejándose de otros cuya fama radica es su imagen televisiva.
"Hasta que no hayas hecho algo por la humanidad, deberías avergonzarte de morir" nos recuerda Hitchens las palabras de Horance Mann. Esa es la razón por la que El Gaucho llego a su últimos días sin un ápice de vergüenza.
Allí esta mi copia esperando su firma. Pero sobre todo estoy a la espera de que las decisiones que ha tomado el autor luego de habernos lanzando su libro al mundo literario nos arroje nuevas sorpresas.
domingo, 22 de noviembre de 2015
Antonio Tabucchi - Sostiene Pereira
Sostiene Pereira
Antonio Tabucchi
Anagrama
184 pp.
"Sotiene Pereira" no hace referencia a que Pereira posee algo entre manos, sino que Pereira "sostiene un idea" y con esta breve frase inicia la historia de Pereira, un periodista entrado en años en plena Portugal de la dictadura de Antonio de Olivera Salazar, con la Guerra Civil española al este y en tiempo de entreguerras. La frase "sostiene Pereira" se va repitiendo a lo largo del libro, como una confesión ante un juez, un policía o ante el autor, como interrogado por una actitud o un policía. O quizá interrogado por su autor. ¿O es que se interroga a si mismo?
Y es que esta historia es la narración de un hombre que ha olvidado los valores de su juventud. Viudo, con sobrepeso y dedicado a la edición de la página cultural del diario conservador Lisboa, Pereira se ve confrontado con un joven idealista que ama la vida y a quien Pereira contrata para que escriba sobre la muerte. El libro va tejiendo una relación de padre-hijo, de hombre maduro que ya no se arriesga y un joven que quiere luchar por la libertad. Tabucci ha construido una novela que no tiene ningún dialogo, sino que estos se entretejan con la narración, la cual es ligera pero no simple: la historia de Pereira es intensa, su drama psicológico es planteado con agudeza y a la vez con sencillez. Tabucci es un maestro de la escritura: nos cuenta una historia profunda en un libro ligero tejiendo una historia que va creciendo hasta su inesperado final.
Sostiene Pereira es altamente recomendable: es una lectura ligera, su extensión en breve, pero sobre todo es un recordatorio de la importancia del espíritu humano, de la libertad y del terror de las tiranías (sobre todo en el mundo de las ideas: Pereira publica una arenga a la Francia republicana como parte de la traducción de un clásico cuento francés y tiene que explicar que aquello no refleja sus ideales políticos).
No hay mucho que decir de este magnífico título, mas que es un libro que hay que leer, En tiempos de intolerancia religiosa y de un mayor control del estado hacia sus ciudadanos, Sostiene Pereira se alza como una fábula sobre lo ridículo que alguna vez fue el mundo occidental y puede volver a ser.
jueves, 1 de octubre de 2015
La chica del tren (Paula Hawkins)
La chica del tren
Paula Hawkins
Planeta -2015
496 pp.
Ya llega el fin de año y se acerca el momento de tomar u respiro y revisar lo que ha sucedido; y en el mundo literario lo que ha sucedido ha sido La Chica del Tren, una bomba que ha generado noticias, titulares, una pronta adaptación al cine y la distinción de haber superado en ventas al Código DaVinci de Dan Brown.
En resumen: es un Best Seller. Y con los Best Sellers siempre sucede lo mismo: algunos alaban al libro y a su autora hasta el límite de lo posible, mientras que otros lanzan sus dardos contra lo sorprendidos que se encuentren de que tanta gente puede estar leyendo un libro de tan mala calidad.
Las cifras son impresionantes: más de 5 millones de copias vendidas (los enamorados de las estadísticas hablan de un libro vendido cada 6 segundos), 20 semanas en la lista de libros del New York Times (acabo de revisarlo y aún sigue allí, algunas posiciones más abajo). No hay que ser mezquino: Stephen King declaró que no pudo volver a dormir hasta no terminar el libro. Además, la han comparado con Perdida de Gilliam Flynn (otra bomba editorial que pudo destronar a la mítica y sobrevalorada 50 sombras de Gray).
¿Por qué tanto alboroto por una novela? Pues porque es un muy buen producto. Para empezar, el texto de la contratapa es atrapante, la novela esta escrita con capítulos cortos y en el que sus personajes se van entrelazando en líneas temporales distintas, contándonos por momentos la misma historia desde distintos puntos de vista (aquí esta la principal semejanza con Perdida), su narración siempre deja cabos sueltos que se van descubriendo mientras el texto logra sostener una atmósfera de misterio y tensión. Es una historia redonda (si lo están leyendo regresen a la primera página una vez terminada la novela y es realmente una nueva lectura) y muy entretenida. Esta claro que este libro no es un "libro de autor": esta hecho y "diseñado" para ser un Best Seller: por eso es un buen producto.
¿Pero es un buen libro? Si, lo es. Si un libro te deja enganchado (junto a 5 millones de personas), te emociona y te deja ganas de recomendarlo, sin duda es un buen libro. Es cierto que al principio no parece ser más que una historia de personajes fragmentados, dañados, enfermos y psicológicamente perturbados que cada vez llenan más los estantes y las series de televisión (por no hablar de la locura zombie...) pero la historia empieza a cobrar más riqueza al avanzar las páginas.
No hay que ser mezquino: en las revistas culturales hacen mención al libro como un récord en ventas, pero sin ninguna recomendación (ni tampoco lo contrario). ¿Es que la cultura no puede ser popular? Creo que hay gente culta que se ofende si se declara en público que el libro que me ha gustado en esta temporada también le ha gustado a un ama de casa.
¿Quién es la chica del tren? Es Rachel, una alcohólica deprimida que simula tener una vida y cuya obsesión en los detalles se vuelca en lo que observa en el tren que la lleva a la ciudad. De manera inadvertida, se obsesiona con la vida de una pareja a la que observa por la ventanilla (la influencia de La Ventana Indiscreta de Alfred Hitchcock es palpable a lo largo del libro), transformándola en una historia idílica de amor entre Jess y Jasón (nombres que ella crea para ellos, Rachel y Scott). Pero la imagen no es perfecta, porque a pocos metros de allí esta su vida pasada, una casa que ella intenta no ver, su ex esposo con su nueva esposa viviendo una vida realmente idílica, la vida que ella no pudo darle... o es que ella esta equivocada y no hay nada idílico en esa escena. Y un día un acontecimiento en la vida de Jess (de la que ella es testigo) la hace cuestionar si lo que ve es cierto y esa curiosidad desencadena la verdadera tragedia.
Hawkins logra construir perfiles psicológicos lo suficientemente profundos para justificar el accionar de sus acciones. Todos los personajes que van desfilando resultan ser poco confiables (desde la alcohólica Rachel con sus lagunas mentales, hasta el atribulado e inestable Scott). La autora logra construir una historia en donde todos los personajes, como sombras, van dejando dudas a cada momento y oscureciendo partes de la historia que otros personajes iluminan para oscurecer otras partes... Hawking cuida cada detalle y trata de no dejar cabos sueltos. Acá no hay buenos ni malos, lo que hay son personajes que no son lo que aparentar ser.
Puedo encontrar algunos inconvenientes: la autora perfila psicológicamente a sus personajes con suficiente hondura, mientras que deja a otros sin tocar (como a los policías, que parecen ser figuras decorativas, lo que es grave para una thriller que no deja de ser un thriller policial).
No he leído Perdida, no he tenido recomendaciones exageradas para acercarme a este libro ni he tenido ningún prejuicio de Best Seller antes de abrir La chica del tren. Y me encontrado con una historia emocionante e intensa. Suelo leer libros de divulgación científica y ensayos, y una novela como la de Hawkins me cae como una brisa fresca de fin de semana que siempre se agradece. ¿Lo recomiendo? Como recomiendo una muy buena película.
martes, 8 de septiembre de 2015
Periodista al fin y al cabo: 20 años de investigación y política en el Perú 1998-2008
Periodista al fin y al cabo
20 años de investigación: Sendero, narcotráfico y política en el Perú 1998-2008
Sally Bowen
Peisa - 2015
Como muchos peruanos a Sally Bowen la conocí como la autora de aquel revelador y aplastante libro El Expediente Fujimori (y debo de reconocer, en mi condición de estudiante, gracias a una edición pirata). Su estilo claro, directo y libre de apasionamientos nos permitió abordar un presente con la mirada atenta a lo que nos estaba sucediendo a finales de la década de los 90s. Pero como escritora, lo que más se sorprendió fue el haber compartido este libro con otras personas y recibir como respuesta que habían devorado en libro en pocos días; personas que normalmente no solían leer ni un solo libro al año.
Y es que Sally Bowen es básicamente una mujer metódica, ordenada, de pensamiento claro e intuición fina. Eso es algo que se puede reconocer en su prosa pero que se confirma en sus vivencias en Periodista al fin y al cabo (cuyo título en inglés, Accident Journalist es mucho más atractivo), 350 páginas donde resume su pasar involuntario por el periodismo en un Perú convulsionado y siempre cambiante.
Esta no es una historia donde se ensalce la actividad periodística o se trata de un soterrado ensayo sobre la defensa de la libertad de expresión o cosa parecida (por eso lo desafortunado del título en español). Bowen es una "periodista accidental", alguien que vino a hacer trabajo social y a ganarse la vida enseñando inglés a "niños bien" para pasar a reportar a grandes medios informativos sobre un país remoto en los momentos en donde resultaba ser noticia. Es un perfecto ejemplo de la persona correcta en el momento correcto.
Bowen nos trae un recuento de primera mano de una época cercana que muchos peruanos, con esa tendencia extraña o recrear nuestro pasado según nuestras pasiones y creencias, estamos olvidando o creemos recordar. No es un texto de alguien de profesa un amor incondicional por "mi país de adopción" (no, de esos que alaban nuestra comida o nuestra creatividad y demás obsesiones como esas): Bowen a encontrado en el Perú grandes amigos, grandes placeres y sobre todo grandes vivencias y aventuras, pero también grandes decepciones (sobre todo con la justicia: su anotación sobre el perjurio y su ausencia de significado en nuestra población es reveladora). Hay párrafos que pueden ofender a algún chauvinista:
Como siempre, me pareció sorprendente que mucha gente bien informada estuviera dispuesta a contar lo que sabía a los periodistas extranjeros. Creo que esta actitud solo la puedo explicar por una especie de vanidad y arrogancia de los peruanos: les encanta demostrar que poseen conocimientos profundos y detalles íntimos.Por sus páginas circulan anécdotas deliciosas (como un Fujimori desubicado en la isla de los Uros), sorprendentes (como los supuestos golpes que el mismo Fujimori les habría propinado a su mujer en lo sótanos del SIN), algunas no tan sorprendentes (como que el ex-ministro de economía Carlos Boloña seguía en comunicación con Montesinos cuando este ya estaba desaparecido) y algunas francamente deleznables (como todo su paso por el poder judicial peruano, aunque a mi me dejo boquiabierto la reunión con el reconocido periodista peruano Gonzalo Iwasaki y su triste actuación en la vida de Bowen).
Si algo se extraña en el libro es que no contenga alguna sección con fotografías de las muchas personas y lugares que Bowen nos retrata. Sería bueno ver a una joven Bowen recorriendo parajes remotos, a la bella Sharon Stevenson y su masa de pelo rojizo, algunos imágenes informales de Todd Smith, cuyo triste asesinato nos recuerda la autora o imágenes de su inesperada fama como ex-rehén de la casa del embajador japones. Además serían fotografías realmente exclusivas ya que una rápida búsqueda en Internet no retorna mucha imágenes.
Me cruce con Sally Bowen en la Feria del Libro FIL2015 y estaba flanqueada por dos tipos bastante más altos y grandes que yo... así que me quede sin la firma de mi copia. Al final, lo que importa es lo que la autora nos deja al final:
Si estas memorias tienen algún mérito, tal vez sea el de recordarle a aquellos que vivieron esos años dramáticos --y ayudar a comprender a quienes todavía eran muy jóvenes-- la necesidad de permanecer lúcidos y atentos, de cuestionarlo todo y a todos, de profundizar en la información, de denunciar la corrupción y de negarse a aceptar a primera vista los hechos como ciertos. Hay que tener en cuenta que el periodismo responsable es fundamental para la salud de una sociedad.Y es que, al fin y al cabo, además de periodista, Sally Bowen es una aguda observadora de nuestra realidad que no espera construir un texto sesudo e intelectual. Lo que ella quiere es llegar a las personas de a pie. Y al igual que en sus libros anteriores, lo logra otra vez.
domingo, 6 de septiembre de 2015
El mago de Lublin (Isaac Bashevis Singer)
Autor:
Isaac Bashevis Singer (Radzymin, Polonia 1904 – Florida, Estados Unidos 1991)
Título original: Der Kunstnmakher fun
Lublin
Idioma original: yiddish
Año de publicación: 1960
Novela
Personalmente, categorizo a los libros
fáciles de leer en dos grupos: Uno, aquellos que recurren al lenguaje de uso
común, a la simplificación de la estructura y la técnica, a los arreglos de
párrafos cortos y elementales, al uso limitado de las palabras para así evitar
el mínimo esfuerzo de raciocinio al lector.
Estos libros, generalmente tienen un argumento ligero y son escritos
solo para entretener momentáneamente, para proveer un instante de
distracción trivial y efímera. No tengo nada en contra de ellos pues cumplen
perfectamente su cometido. Por otro lado, están aquellos libros que lucen una
diáfana claridad fruto de la exactitud en el uso sintáctico, a la precisión en la elección de las palabras
y al ritmo y compás fruto de una rigurosa estructuración de párrafos. Además de
tratarse de arreglos lingüísticos bellos en su armonía y precisos en su
estructura, este tipo de textos permiten al lector fluir con facilidad en el
proceso de lectura y concentrar de lleno su atención en la reproducción mental
de los hermosos escenarios y complejas situaciones que el texto va describiendo
para desplegar un argumento potente y definitivo.
“El mago de Lublin”, escrito originalmente
en lengua Yiddish, lengua que a pesar de la barbarie del holocausto no dejó de
existir, pertenece claramente a este
segundo grupo.
Luego de varias semanas de haberlo leído,
aún experimento la sensación de desesperación y desconsuelo de Yasha Mazur, el
personaje central. Un hombre que vive recorriendo con su espectáculo de magia
y escapismo los más remotos poblados de la Polonia oriental. En su vida
personal, Yasha es también un contorsionista. Alejado de los preceptos de Dios,
a pesar de su origen judío, vive una existencia desquiciada. Enredado en múltiples
aventuras amorosas, el artista es incapaz de reprimir sus instintos, los mismos
que le provocarán una crisis moral, de la que no se podrá liberar. Arrastrando
un sentimiento de culpa inmenso por la posibilidad de abandonar a Esther su
esposa, por el daño infligido a la entregada Magda, por no haber ayudado a su
amante Zeftel y por la posibilidad de fallarle y perder a Emilia la viuda que
logró arrebatar su corazón, Yasha sucumbe a una crisis ética. El infalible mago
de Lublin, el más famoso escapista de los alrededores, no podrá escapar de sí
mismo.
Esta no es una historia romántica, es más
bien el relato vital sobre los conflictos interiores que todo hombre debe
afrontar. Yasha Mazur, terminará entregándose a una vida ascética buscando expiar sus culpas. La carga cultural resultó ser demasiado pesada, y terminará
entregándose al Dios de sus padres, al mismo que intentó negar.
Cada quién tiene una historia, pero
nuestra historia también nos tiene a nosotros y en muchos casos resulta ser más
fuerte.
miércoles, 12 de agosto de 2015
Un hombre flaco (Daniel Titinger)
Un hombre flaco
Retrato de Julio Ramón Ribeyro
Colección Vidas Ajenas
Daniel Titinger
Universidad Diego Portales
"¿Cuánto se parece un autor a su obra?" Esa es la pregunta que se hace insistentemente Titinger en su breve libro Un hombre flaco, Retrato de Julio Ramón Ribeyro, un escritor (catalogado en vida como el mejor cuentista peruano) cuya grandeza es tanta como su anonimato. Quienes queremos a Ribeyro y consideramos el despropósito de no incluir a La Palabra del Mudo como uno de los textos esenciales de la literatura latinoamericana (en buena parte porque no forma parte del boom) celebramos la aparición de este libro y que luego de buscarlo en librerías y tiendas por fin lo haya encontrado en un sencillo stand en la FIL2015 (y el libro más caro de todos los que compré). Y eso mismo es una paradoja Riberyana: un bello retrato de Julio Ramón escondido entre las librerías más sencillas y anodinas, como sus personajes tristes, olvidados, fuera de la luz pública: los mudos a los que Ribeyro les daría voz.
Daniel Titinger es un escritor que conoce su oficio y sus divertidos libros previos, Dios es peruano y Cholos contra el mundo, no han sido más que una preparación para alzarse con esta crónica de un periodista que trata de conocer a su héroe literario: porque Titinger ama a Ribeyro, tanto como su obra. Ayudado por el diario personal de Ribeyro (La tentación del fracaso, publicado recientemente en un solo volumen) y por múltiples entrevistas, Un hombre flaco describe el viaje de descubrimiento personal de su autor por el Ribeyro escritor, el esposo, el hermano, el padre, el intelectual, el bohemio, el amante, pero sobre todo el amigo (desfilan personajes tan disimiles como Fernando Ampuero, Jorge Bruce, Abelardo Sanchez León, Niño de Guzman, Tomás Unger... hasta una referencia como la del astrólogo Leonardo Dobrota con la carta astral de Ribeyro, acertada como ningún crítico literario ha sido con el).
El texto va saltando en tiempo y espacio, mientras Titinger va construyendo un personaje cercano al fracaso, enfermo, quebrado, atrapado en un matrimonio infeliz, en un trabajo depresivo, perseguido por los errores de los editores en sus libros (en un libro equivocan su foto y publican la de un africano con el mismo nombre), pero también un amigo alegre, dado al buen vino y al placer del cigarrillo, cantante de karaokes y dado a los ritmos de Oscar de León (!). Titinger ha volcado su corazón y ha escrito un retrato necesario y honesto, un texto desapasionado y sobrio sin ser académico, un libro breve pero intenso: un Ribeyro que muchos queríamos conocer.
Y es que Julio Ramón siempre fue un anónimo por vocación propia. Su distanciamiento de Mario Vargas Llosa no solo por razones políticas (Ribeyro estuvo de acuerdo con la nacionalización de la banca peruana, cosa que alzó a MVLL contra el gobierno y condujo a la creación del Fredemo, tal y como esta el El pez en el agua) sino por razones de fama: Ribeyro ya no soporta a un Vargas Llosa que describe como un dueño de la verdad, un hombre cambiado luego de haber ganado tantos premios, un hombre con quien no quiso polemizar porque siempre lo consideró su amigo (y viceversa: cuando Ribeyro estuvo en su "primera muerte" MVLL no pudo soportar verlo tan mal). Los capítulos de Bryce Echenique estén entre los mejores: Titinger hace aparecer a un Bryce tan locuaz y fantástico que el mismo advierte que es difícil saber si esta contando algo cierto o es la forma como Bryce recuerda las cosas, tan divertidamente deformadas. Y por supuesto, para hablar con Bryce tiene que haber vodka...
No quiero ahondar mucho en el libro porque sería arruinarle los detalles a quien se interese por un autor tan grande como Ribeyro. Este libro es un verdadero encanto y Titinger se ha alzado ya no solo como un escritor divertido y un hábil cronista, como ya lo había demostrado en sus dos libros anteriores, sino que deja claro que puede crear un libro de autor para los lectores de a pie, como son los libros de Ribeyro.
Y es que hay que leer La palabra del mudo y descubrir a uno de los mas grandes cuentistas del mundo. Y hay que leer a Titinger para conocer mejor a su autor.
jueves, 6 de agosto de 2015
El Proyecto Esposa (Graeme Simsion)
El proyecto esposa
Graeme Simsion
Editorial Salamandra
Año: 2013
320 pp
Entre los libros que Bill Gates recomendó para sus lecturas de verano estaba este de enigmático título original en inglés The Rossie Project (bastante más acertado que el título en español), haciendo el comentario adicional que no podía evitar reírse y despertar a su esposa en medio de la noche. La publicidad gratuita que recibió Graeme Simsion rebotó en la Internet y catapultó a su autor (un informático que luego de hacer mucho dinero vendió su empresa y se dedico a lo que realmente le interesaba: escribir) y a su novela al ojo público. (Aquí el trailer del libro).
El Proyecto Esposa es una comedia romántica y su entrada en Goodreads esta llena de elogios por parte de muchas lectoras. Pero no es un libro para mujeres. Puede ser una historia romántica, pero sobre todo es una comedia soportada en el personaje principal, Don Tillman.
Don es un tipo raro, metódico, eficiente, cerebral pero sobre todo incapaz de sentir emociones. Con la ayuda de los dos únicos amigos que tiene en la vida (un viejo verde y su esposa) se embarca en un proyecto al que denomina Proyecto Esposa ya que tiene noticias de que los hombres casados viven más sanos y más tiempo, por lo que requiere casarse, pero no puede superar la primera salida y es rechazado por todas las mujeres (aunque el mismo dice que es un tipo bien parecido, pero su incapacidad de relacionarse con el resto de la humanidad hace que le sea imposible relacionarse con una mujer).
Así es como Don cuenta su historia, narrada de forma cerebral, metódica y científica. El eje central de su proyecto es un cuestionario de dieciséis páginas que las chicas deben de resolver para poder descartar de manera eficiente a las posibles pretendientes y hallar la esposa ideal: IMC saludable, no fumadora, abstemia, puntual, sin historial de enfermedades venéreas, capacidad para resolver operaciones matemáticas básicas... Y es que Don tiene que hacer todo de forma metódica.
Como ya se lo pueden imaginar, nada sale como se esperaba pues llega Rossie Jarman, la antítesis de la esposa ideal (tardona, fumadora y camarera en un bar) y hace trizas todos los planes, no solo alterando la vida de Don sino que además lo termina interesando en otro proyecto en donde utiliza todas sus capacidades como profesor de genética en la búsqueda de una persona importante para Rossie.
Este es un libro de fácil lectura. No vas a encontrar frases que anotar o momentos de lucidez y descubrimiento. No. Este libro es sencillamente un libro divertido para pasar un buen fin de semana. Es una historia fresca y aunque puede ser poco original, el autor logra enganchar con el misterio del proyecto genético hasta el último capítulo y al hacerlo crea un universo de personajes entrañables que continúan su historia en El Proyecto Matrimonio, el segundo libro de Simsion.
Si le encuentro un mérito adicional al libro más allá de contar una historia divertida (y debo confesar que entre mis varias lecturas de novelas negras, libros de divulgación científica y ensayos de toda índole uno de vez en cuando quiere sentarse y leer algo que te alegre el día) es el remarcar lo diferentes que somos los seres humanos. Don a todas luces manifiesta comportamientos del espectro autista y su historia es la de un autista que no entiende porque todos los demás son tan emotivos, porque las personas son tan irracionales pero sobre todo porque todos son tan anormales.
Repito: este no es un libro para mujeres; por el contrario. Las opiniones negativas de este libro versan sobre lo prototípicos de sus personajes: Don es un cliche de un Asperger y Rossie la típica chica energética de película gringa que puede curar el autismo con su amor. Pero hay que entender a Don no como un caso médico: es una exageración de todos los hombres que tratamos de racionalizar nuestras relaciones y que tenemos que enfrentarnos a esta Rossie, una exageración de las emotividad femenina. Estoy seguro que por momentos un lector puede darse cuenta que Don ha metido completamente la pata al hacer o decir algo, pero sabe que en el fondo sus acciones son justificadas para un cerebro masculino. Y es alrededor de este descubrimiento que se suceden los momentos más divertidos del libro.
Estoy seguro que colocar en cola este libro entre otros títulos más serios e intelectuales es una muy buena idea para tomar nuevos aires y continuar a temas más serios.
miércoles, 29 de julio de 2015
Dora Bruder (Patrick Modiano)
Dora Bruder
Patrick Modiano
1997
Seix Barral
Biblioteca Formentor
Traducción: Marina Pino
La lectura casual de un aviso en un viejo ejemplar de 1942 del periódico Paris-Soir dio inicio a una aventura dolorosa, llena de dificultades, luchando contra el olvido.
Patrick Modiano
1997
Seix Barral
Biblioteca Formentor
Traducción: Marina Pino
El 7 de diciembre del 2014 a las 17:30
de la tarde un emocionado Patrick Modiano pronunciaba el tradicional
discurso de aceptación del premio Nobel de Literatura en el Salón de la Bolsa
de la Academia Sueca en Estocolmo. El hermoso salón dorado, decorado con estatuas
blancas e impresionantes arañas de cristal, lucía repleto.
Las primeras palabras del
escritor francés fueron:
Quiero
decirles que estoy muy contento de estar con ustedes. Estoy conmovido porque me
han otorgado el Premio Nobel de Literatura. Es la primera vez que hablo ante un
público tan numeroso, y estoy temblando un poco.
Sin embargo, a pesar de su timidez
crónica, Modiano pronunció un lúcido discurso en el que habló de lo que
significa la literatura para un hijo de la post guerra y del papel del lector
en la dinámica interminable de la expresión escrita.
En uno de los pasajes del
discurso, el ganador del Premio Nobel de Literatura 2014, refiriéndose a las
dudas que asaltan al escritor en medio
de una obra, dijo:
Es
como estar al volante por la noche en invierno y seguir manejando en medio de
la bruma y la nieve, sin visibilidad. Usted no tiene otra opción, no se puede
dar marcha atrás. Debe seguir avanzando por el camino diciéndose que con el
tiempo será más seguro y la niebla se disipará.
Patrick Modiano sabía bien de qué
hablaba. “Dora Bruder”, su fabulosa obra, refleja en sus 127 páginas esa
apuesta por lo desconocido, esa necesidad irreprimible por continuar a pesar de
la incertidumbre y esa imposibilidad absoluta para detenerse, para claudicar.
La lectura casual de un aviso en un viejo ejemplar de 1942 del periódico Paris-Soir dio inicio a una aventura dolorosa, llena de dificultades, luchando contra el olvido.
París
Se
busca a una joven, Dora Bruder, de 15 años, 1.55 m, rostro ovalado, ojos gris- marrón,
abrigo sport gris, pullover burdeos, falda y sombrero azul marino, zapatos
sport marrón. Ponerse en contacto con el señor y la señora Bruder, bulevar
Ornano, 41, París.
Modiano reconoció en el viejo
aviso lugares que había recorrido con frecuencia al lado de su madre en el
pasado. Y detectó en el tono trágico del anuncio el desamparo de toda una
generación. Luego de ello ya no podrá dar marcha atrás, la necesidad de
reconstruir esa biografía y a través de ella, de forma simbólica, la de toda
una época, lo llevará a través de una estremecedora aventura contra el olvido confrontándose
paso a paso con el dolor y la barbarie de una época infame.
Reconstruir la biografía de Dora,
especialmente la de los días entre la fuga del internado y la aparición de su
nombre en una lista de internos en el campo de concentración de Auschwitz
significará para el autor un esfuerzo descomunal no solo desde el punto de
vista físico, sino además y sobre todo desde la óptica moral. Los datos que
quedan disponibles son escasos, las pistas con que se cuenta insuficientes, la disponibilidad
de algunos testigos para recordar los hechos casi nula. Como avanzar en medio
de la bruma, sin visibilidad.
Pero es menester seguir
adelante. Modiano siente una necesidad
imperativa por conseguir respuestas. Por Dora, por su propio padre, por todos
aquellos que por una infamia lo perdieron todo, pero además por él mismo.
El libro completo refleja el
esfuerzo del autor por rescatar esa historia del olvido. Con magistral cálculo
va construyendo una obra de una precisión casi quirúrgica y de una
trascendencia histórica inmensa.
Al final, y a pesar de los pocos
datos concretos que se logra recuperar, la obra constituye un manifiesto en
contra del olvido y una promesa hacia las víctimas de que la barbarie no se
repetirá.
Como corolario, un párrafo final
monumental, que por obvias razones, basadas en el respeto al lector, no
reproduciremos en esta reseña.
Nada más por decir.
‘Dora Bruder’ es un libro que
debe ser leído.
viernes, 24 de julio de 2015
¿Por qué no hay socialismo en los EE.UU.? (Werner Sombart)
¿Por qué no hay
socialismo en los Estados Unidos?
Werner Sombart
1906
Werner Sombart
1906
Traducción:
Christine Loffler y Javier Noya Miranda
Es prácticamente
imposible encontrar un ser humano maduro intelectualmente que no tenga
una postura definida sobre los Estados Unidos y la influencia de este colosal
país sobre el destino del resto de la humanidad. Las opiniones
suelen ser extremadamente opuestas pero son siempre apasionadas y plagadas de
argumentos muy elocuentes y en algunos casos demasiado inflamados.
En un caso como
este y en cualquier otro, el intento por ofrecer al lector un análisis
objetivo, desapasionado e imparcial del tema es, desde ya, una virtud que se
debe reconocer y aplaudir. Werner Sombart, economista y sociólogo alemán,
definitivamente posee esta virtud y hace gala de ella en este interesante libro.
Partiendo desde
una posición marxista, Sombart fue migrando con los años hacia posiciones menos
extremas. El dedicar su vida entera al estudio de las grandes tendencias socio
económicas lo fue equipando de la objetividad y serenidad que solo alcanzan
aquellos que se involucran sin reparos y directamente en la materia de estudio.
Su obra “¿Por qué no hay socialismo en los Estados Unidos?”, publicada en 1906,
es sin duda un material de referencia indispensable para entender a la sociedad
americana y para encontrar algunas explicaciones del porqué este país ha sido
hasta hoy inmune a las fiebres del socialismo y el colectivismo. Padecimientos
que han sufrido, prácticamente, todos los demás países del mundo en mayor o
menor medida.
Sombart esgrime
en su obra un conjunto de razones que responderían esta inquietante pregunta.
Algunas de las cuales resultan ser interesantes, desafiantes y hasta turbadoras.
Se empieza con
un análisis peculiar de la sociedad y la mentalidad americana.
Si es
al éxito al que dirige sus plegarias el americano, su esfuerzo se dirigirá
siempre y en todo lugar a llevar una vida acorde con la voluntad de ese dios.
El
éxito significa para el norteamericano medio, en primer lugar, llegar a ser
rico.
Su
máxima fundamental es vivir y dejar vivir.
Para luego
analizar despiadadamente a los dos grandes partidos.
… hay
que añadir que la maquinaria política está desde hace años en manos de partidos
bien acomodados. Por lo tanto, las dificultades para un partido nuevo son
dobles…
Se
trata de un procedimiento comprobado que los partidos en el gobierno están
empleando desde hace muchos años con gran éxito: “desactivar” a los líderes
laboralistas otorgándoles un cargo bien remunerado.
Al
norteamericano le es insoportable la idea de pertenecer a un partido que sale
una y otra vez de las urnas con unas cifras minúsculas de votos…
Si hace
falta, incluso aúnan esfuerzos por un tiempo para poder eliminar a unos
competidores atrevidos.
Tienen
este monopolio ya que son los grandes partidos y son los grandes partidos, ya
que tienen este monopolio.
Es
ahora cuando es más clara la falta total de principios de ambos grandes
partidos.
…no
será posible hoy día encontrar una orientación de clase determinada en los dos
grandes partidos de Norteamérica.
Analiza también
la estructura estatal que aunque en muchos casos de manera ficticia, refuerza
la idea de soberanía del ciudadano.
Es una
particularidad del ciudadano norteamericano… el ver en la Constitución de su
país una especie de revelación divina…
… la
Constitución entera está cimentada en la soberanía del pueblo…
Así
nace en cada individuo un sentimiento de poder ilimitado; por muy imaginario
que sea, en su conciencia es una realidad indudable.
La
mayor parte de las veces, el ciudadano no mueve ni un dedo para eliminar las
situaciones de dominio en la vida pública, pero, a pesar de esto, vive en la
firme convicción de que con solo desearlo puede ponerle fin.
Para concluir
con un análisis del trabajador y su relación con el empresario.
En los
Estados Unidos el trabajador tiene subjetivamente el pleno derecho a ufanarse y
decir con la cabeza bien alta: civis americanus sum.
El
roastbeef y la tarta de manzana acabaron con todas las utopías socialistas.
… el
empresario se esforzaba mucho en comportarse de forma educada y amable con el
trabajador, ya que en un principio no se disponía de suficiente mano de obra.
Uno de
los más brillantes méritos del carácter diplomático del empresario
norteamericano es el de mantener de buen humor a sus trabajadores a pesar de
toda la explotación real.
Queda mucho más
por comentar sobre esta obra, pero considero que lo fundamental es
recomendarla.
Surgirán sin
duda las voces que alerten que es una obra de hace más de un siglo atrás y que
dudarán por ello de su validez. Considero que esta es más bien una virtud
adicional del libro, pues podremos analizar las páginas de una obra que
desmenuza con más cernía los orígenes de la sociedad Americana.
El único gran
error del autor, es el presagio que deja en el último párrafo de su obra:
Mi
visión actual vendría a ser ésta: todos los elementos que hasta hoy han
retrasado el desarrollo del socialismo en los Estados Unidos están en vísperas
de desaparecer o de convertirse en su contrario, de manera que, según todos los
indicios, el socialismo en los Estados Unidos va a tener su auge plenamente en
la próxima generación.
Queda claro pues
que Sombart fue un gran economista y sociólogo, pero que la previsión del
futuro era una materia que no le sonreía.
Más que para
leerlo, “¿Por qué no hay socialismo en los Estados Unidos?” es un gran libro
para estudiarlo y analizarlo.
viernes, 17 de julio de 2015
La soledad de los números primos (Paolo Giordano)
La soledad de los números primos
Paolo Giordano
2010
Editorial Salamadra
Michaela lo miraba con expresión seria y no contestó, porque nada podía contestar. Tampoco dio muestras de haber comprendido, pero sus ojos se avivaron un instante, y durante el resto de su vida Mattia pensaría que aquellos eran los ojos del miedo.¿Qué? ¿Y que sigue?...
Fue allí donde termina la muestra del libro en formato electrónico en iTunes... y luego de 22 páginas en donde Paolo Giordano nos introduce a los dos personajes principales de su soberbio libro, era imposible no continuar con la lectura. Tarjeta de crédito y zas!... y ha sido una grata sorpresa.
Giordano es un físico teórico y estos no suelen escribir novelas (y menos un título ganador del premio Strega al mejor titulo en idioma italiano). El nombre del título es bastante sugerente, así como la fotografía de la portada.
Alice y Mattia son dos personas quebradas (física y emocionalmente) que Giordano compara con los números primos gemelos, números diferentes a todos los demás y que nunca pueden ir juntos ya que siempre hay un número par entre ellos (3 y 5, 7 y 9...). Al igual que sus pares numéricos, Alice y Mattia no pueden estar juntos y es la soledad su compañía perpetua. El libro esta cargado de melancolía, de sentimientos de abandono pero sobre todo esta escrito con un lenguaje muy emotivo. Giordano sabe expresar las emociones de sus personajes, es un buen observador de las manifestaciones del corazón pero sobre todo es un ágil narrador.
El libro transcurre fácilmente, segmentado en breves capítulos que van adentrándonos en la vida de Alice y Mattía, desde su niñez hasta su vida adulta. La primera mitad del libro es la mejor lograda ya que sus sentimientos de adolescencia son más frescos y expresivos. Muchos lectores se han enganchado tanto al libro que le han reclamado al autor que hay líneas argumentales que quedan sin respuesta. Es cierto, pero es parte del mensaje del libro: en la vida, muchas cosas siempre quedan por decir.
Giordano nos hace llorar, reír y sobre todo sufrir con sus personajes. Logra transmitir sus vacíos y ausencias, y sobre todo nos transmite la nostalgia de una vida que pudo ser, un sentimiento que todo en el fondo hemos expresado en alguna oportunidad.
Pocas veces he leído las primeras páginas de un libro y no he podido soltarlo hasta terminarlo y hace mucho tiempo que no recomiendo una novela con tanta intensidad. La mayor parte de mis lecturas versan en temas científicos, divulgación, ensayos o matemática, y esta última es la razón por la que me llamó la atención la novela y no es poca cosa esperar un libro de matemática y terminar leyendo una novela que uno termina recomendando.
¿Has leído este libro? ¿Crees que Paolo Giordano es un nuevo Milan Kundera? Habrá que echar un vistazo a El Cuerpo Humano, el siguiente libro del mismo autor y ver si me vuelve a sorprender.
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